Discurso inaugural: promesas, sueños de grandeza y proteccionismo
- Mónica González
- 20 ene 2017
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En el marco de la toma de protesta del ahora Presidente 45 de los Estados Unidos, Donald Trump brindó su primer discurso oficial dirigiéndose a la nación en tono firme, reafirmó las promesas hechas durante su campaña, así como los sueños de grandeza, que le valieron las preferencias del electorado con tendencias extremistas, racistas y nacionalistas.

Contrario a lo que esperaban los analistas, un llamado a la unificación del pueblo norteamericano, el discurso deja un sabor agridulce en su país y para la comunidad internacional.
Las palabras de Trump se caracterizaron por una fuerte crítica hacia el desempeño de los políticos americanos del pasado, al tiempo que describió un escenario caótico para su nación, mismo que requiere un orden que sólo él puede imponer.
Se dirigió también a la comunidad internacional con un mensaje claro, un fuerte proteccionismo en el que declaró que “hemos enriquecido a otros países” e hizo un llamado para “comprar americano y emplear americanos”, agregó “Vamos a deslumbrar a todos para que nos sigan”.
Los sueños de grandeza para la unión americana son razgos característicos de los discursos del mandatario, por lo que no desaprovechó la oportunidad de enviar este mensaje en su discurso inaugural con frases como "Cuando estamos unidos, somos imparables… no debemos temer pues estamos protegidos…un nuevo orgullo nacional nos elevará, nos sanará".
Al término del evento, los analistas ya evalúan los alcances de la política comercial y relaciones diplomáticas con México y China, mientras los mercados se mantienen a la expectativa de los primeros acuerdos y medidas que Trump haga oficiales.
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